Bailando al compás del vals. Bandaloop

No hace apenas ni una semana que se publicó el vídeo "Waltz on the Walls", el último trabajo de Bandaloop, y ya está cercano al millón de visitas. No me extraña, todos los espectáculos de esta compañía, especializada en danza vertical, me parecen asombrosos y los vídeos de sus actuaciones se convierten en virales casi instantáneamente. Si encima lo publica en su canal Go Pro, la compañía californiana fabricante de las cámaras de alta definición más versátiles del mundo usadas, frecuentemente en actividades o deportes extremos, el número de espectadores se incrementa notablemente. Los vídeos rodados con estas cámaras acostumbran a ser impresionantes. Yo, por si lo necesitan, que no lo creo, lo comparto solo por la sencilla razón de que me encanta. No me canso de darle al play !!

Apagar las luces

Este vídeo, que nos descubre el impresionante y bello espectáculo de danza creado para la posterior actuación, el pasado mes de agosto, de Bandaloop en la 14ª edición del Festival Art and Soul de Oackland, y ejecutado sobre la pieza musical "Hopeless Romantic" de William Ryan Fritch, fue rodado para la compañía Go Pro y grabado con dos cámaras Go Pro Hero 3+, una en ángulo contrapicado y otra colocada sobre el cuerpo de la bailarina. La grabación nos muestra la increíble coreografía que los bailarines Roel Seeber y Amelia Rudolf, coreógrafa y fundadora  de Bandaloop, realizan sobre un lienzo vertical perpendicular al suelo desafiando una vez más las leyes de la gravedad. La actuación se llevó a cabo a 320 metros de altura en la fachada del histórico edificio de la alcaldía City Hall Oakland, una imponente construcción de 18 pisos. Atados con arneses y cuerdas utilizados en alpinismo, los dos bailarines danzan suspendidos en libertad haciendo con maniobras aéreas asombrosas y movimientos difíciles de sincronizar, una hermosa perfomance con un efecto visual totalmente impresionante.

Todas las actuaciones de la compañía pionera en danza vertical Bandaloop, fundada por Amelia Rudolf en 1991, han sido realizadas en espectaculares parajes naturales o distintos escenarios urbanos como puentes o fachadas de rascacielos haciendo uso de técnicas de escalada y rappel combinadas con el arte y la danza moderna. En ellas se refleja el interés de este movimiento artístico por explorar las relaciones entre el movimiento y la gravedad, por la conciencia ambiental, la redefinición de los espacios naturales y públicos y por la reimaginacion o reinvención de la danza contemporánea.

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Fotografiando alimentos (II) : Beth Galton - "Cut Food"

Casi todas las personas que nos mantenemos, en mayor o menor medida, en las redes sociales de una manera activa, hemos fotografiado alguna vez, aunque sea con nuestro teléfono, algún plato de comida en un restaurante. O unos productos que nos han llamado la atención en un puesto de algún mercado, o un bizcocho, tarta, pan... recién salidos de nuestro horno. A quién no le gusta fotografiar la comida que entra por nuestros ojos !! Algunas personas habrá que no lo hagan, es evidente, pero los que lo hacemos, lo hacemos con el fín de compartirlo con nuestros amigos, de compratir el momento placentero que supondrá degustarlo, de compartir orgullosos nuestra creación que huele que alimenta !! de hacer una foto que triunfe en las redes, quizá simplemente queremos conservar el recuerdo de aquel plato tan espectacular que nos comimos o también, por qué no, impresionar o dar envidia, "mirad lo que me voy a comer" !!

Yo misma hago fotos con mi smartphone, a veces por alguna de estas razones, a veces por más de una. No son fotos espectaculares, no tengo grandes medios y mi creatividad es la que es, pero con la cámara de mi teléfono, hasta ahora, me he ido defendiendo para ilustrar, por ejemplo, las recetas que aparecen en este blog y ahora ya voy evolucionando, lentamente, con el objetivo de ofrecer mejores instantáneas a base de aprender técnica e invertir en medios.

La mayoría de las fotografías de comida o alimentos que aparecen en libros de recetas, revistas o blogs especializados están hechas por la colaboración de un fotógrafo y un estilista culinario. En ocasiones hay todo un equipo detrás y a veces, como ocurre con mis recetas yo soy el fotógrafo y el estilista y también hago de director creativo, asistente, productor y llevo el trabajo de edición y postproducción. Para ello tomo cursos, observo muchas imágenes de fotógrafos profesionales para educar mi ojo y aún así qué difícil es capturar la esencia estética y culinaria del plato en una fotografía y que regular que se me da componer una buena imagen donde se refleje mi estilo, mi personalidad o las tendencias del momento en lo que se refiere a fotografía gastronómica. Conseguir que tus fotos transmitan al espectador el deseo de probar esos alimentos y que estos parezcan sugerentes, apetecibles y sabrosos no es nada fácil. Lo puedo asegurar.

Abrir la página web de Beth Galton, fotógrafa neoyorkina con una larga trayectoria en fotografía de alimentos, es quedarse embelesado con sus espectaculares imágenes. Su pasión por la fotografía unida al interés creciente por la comida que fue adquiriendo poco a poco de manera fortuita, hace que sus trabajos no solo sean resultado de un proceso creativo o reflejo de una buena estética visual, sino que reflejen la importancia de la comida sana y de los alimentos frescos y orgánicos. Cut Food es una serie de fotografías realizadas por la colaboración entre Beth Galton y Charlotte Omnès, estilista culinaria. Ambas idearon este proyecto a consecuencia de la experiencia que tuvieron en un trabajo de publicidad anterior donde al cortar un "burrito" por la mitad observaron "un maravilloso mundo interior" y decidieron explorar esta perspectiva de presentación de los alimentos.

Sin retoques digitales, excepto para el montaje, con técnicas de iluminación basadas en el mundo del cine y con fondos negros y limpios para resaltar las cualidades de los alimentos, las fotografías de la serie Cut Food muestran una visión inusual de algunos alimentos habituales o productos de consumo diario, tanto sólidos como líquidos, que proporcionan una nueva perspectiva y un interés visual distinto de lo acostumbrado. Beth Galton y Charlotte Omnès consiguen cortando transversalmente por la mitad estos alimentos y preparaciones, unas sencillas pero impactantes imágenes llenas de texturas, formas y colores donde la sorprendente visión de los objetos sigue mostrándolos sabrosos y apetecibles a pesar de no ofrecer un punto de vista común en la fotografía gastronómica. Para hacer fotografiables a estos alimentos, sobre todo a los líquidos, y conseguir estas atractivas fotografías,  utilizaron algunos tipos de gelatina que hizo que se solidificaran, no se vertiesen o desparramasen por la gravedad y pudiesen ser cortados. 

Otros interesantes trabajos conceptuales de Beth Galton (Landscape, Idioms, Suggested Recipes, Texture) además de multitud de fotografías de alimentos y "Still Life" podéis encontrarlos pinchando aquí en su página web. 

Apagar las luces

Cut Food from Beth Galton Studio on Vimeo.

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Corres sufriendo ?? Corre disfrutando !! ChiRunning

Ilustración: Yuko Shimizu

"Nuestra Vía Láctea tiene un centro alrededor del cual rotan todas las estrellas de la galaxia. Nuestro sistema solar tiene un centro, el Sol, alrededor del cual giran todos los planetas. Nuestra Tierra tiene también un centro, y gira sobre un eje que la atraviesa de parte a parte. Mi país tiene un centro que suele decirse que está por la zona de Missouri, aunque nunca he estado allí. En la técnica del correr Chi todo comienza por aprender a localizar y sentir tu centro cuando corres".

(Danny Dreyer)

Si eres runner y practicas la carrera utilizando una técnica específica o competitiva en tus entrenamientos, o simplemente corres a tu antojo sin aplicar técnicas ni estilos definidos pero con ganas de superación, seguramente sigas una frase que determina claramente tu actitud y tu practica deportiva: "si no sufres, no mejoras". Este razonamiento que refleja en gran medida el deporte y el pensamiento occidental es la base de lo que Danny Dreyer, creador e instructor del ChiRunning, denomina "correr fuerza", o lo que es lo mismo, el modo de correr común en el que se emplea la fuerza como medio para avanzar o evolucionar y obtener resultados.

En el correr fuerza, el metodo de entrenamiento se basa en desarrollar la fuerza de las piernas, fortalecer los musculos de estas y descargar en ellas la responsabilidad del trabajo. La velocidad y la fuerza de las piernas ayudaría así a correr mejor y evitar las lesiones. El modo correr fuerza funciona, a la vista está para todos aquellos que practican running de una manera profesional o amateur y mejoran sus tiempos o distancias con su trabajo y esfuerzo, sin embargo, tiene un precio muy alto: el alto numero de lesiones que origina el sobreentrenamiento. El ChiRunning es una nueva tendencia de entrenamiento de carrera que ofrece una alternativa, otra técnica u otra opción a este tipo de entrenamiento. El modo de correr Chi, muy en boga en Estados Unidos en los últimos años, es un entrenamiento de carrera que promueve una técnica consciente y un modo de correr más eficiente energéticamente con el que correremos mas rápido y tendremos menos dolor. Desde 1999 esta forma de correr ha ayudado a muchos corredores a transformar su técnica para prevenir, reducir y recuperarse de lesiones pasadas. Quien de una manera u otra ha practicado alguna vez running, en algun momento, antes o después,  ha sufrido en sus pies, tobillos, rodillas o caderas alguna de las lesiones mas comunes de esta dura actividad. Para el ChiRunning correr no daña tu cuerpo si no el modo de hacerlo.

El modo de correr Chi se basa en una serie de lecciones y principios del movimiento del Tai Chi, arte marcial chino milenario, que ayudan al corredor a entrenar y correr de un modo mas eficiente y con menor esfuerzo, de una forma mas natural y placentera, tomando conciencia del cuerpo y de todos sus movimientos para hacer una carrera más consciente, canalizar mejor la energía, y evitar el dolor y las lesiones. El ChiRunning no trata de trabajar la fuerza de las piernas para ganar velocidad o distancia. Estas serán la consecuencia lógica  de un eficiente estilo de carrera.

El Chi es la fuerza energética que anima todas las cosas, es la energía que une cuerpo, mente y espíritu, la fuerza vital que genera el movimiento físico. Por otra parte es ademas la energía que se crea con el movimiento, una fuerza invisible que discurre a través de un sistema de meridianos que distribuyen equilibradamente la energía a todas las partes del cuerpo. Con la practica de la relajación , la meditación y la concentración cada uno de nosotros podemos aprender a sentirla y dirigirla, a dirigir los movimientos desde ciertos puntos de la columna vertebral por lo que estos movimientos pueden originarse desde nuestro centro de gravedad. Para que nuestras piernas reciban todo el poder de la energía chi procedente de la columna deben estar relajadas, esto significa mover el cuerpo desde su centro y dejar que las piernas sean arrastradas en la carrera pues será nuestra gravedad la que de el impulso y no la fuerza de las piernas. Para el ChiRunning en el correr fuerza toda la responsabilidad recae en las piernas y esto según los principios del Tai Chi es un modo desequilibrado de mover el cuerpo.

Si alguna vez hemos mirado como juegan los niños habremos observado como corren. Los niños corren jugando, de una manera natural y divertida, sonriendo, con determinación y sin tensión. Corren ligeramente inclinados hacia adelante y dando zancadas hacia atras. Y no se lesionan. Pero los niños realizan esta forma de correr de un modo no consciente. Nosotros los adultos hemos dejado progresivamente de correr como lo hacíamos en nuestra infancia, en parte por el propio proceso de maduración del ser humano y en parte por el efecto acumulativo del estres y la tensión que determina como nos movemos. Ahora en nuestra etapa adulta nuestro trabajo debe consistir en movernos conscientemente con la fluidez con la que lo hacíamos de pequeños y es solo a través de esta acción consciente cuando podremos dominar nuestro cuerpo, conectar con él y con nosotros mismos. Así el ChiRunning nos propone aprender a escuchar el cuerpo, a sentirlo y realizar los ajustes necesarios para mejorar nuestra forma física y nuestro rendimiento en la carrera a la vez que usamos esta para descubrirnos a nosotros mismos.

La técnica de ChiRunning replanteará nuestra práctica de correr al combinar relajación con una correcta forma biomecánica de carrera. El entrenamiento Chi requiere por nuestra parte la adopción de una buena postura y una correcta alineación; una zancada con pisada neutra y una mayor cadencia de pasos; activar nuestro "core" (nuestro centro, "dan tien") para que desde él fluya de manera armoniosa nuestra energía; tener los miembros superiores e inferiores relajados, las articulaciones sueltas y los músculos internos dispuestos; utilizar una inclinación controlada hacia adelante y usar la gravedad para impulsarnos; transferir la carga de trabajo desde las piernas a nuestro abdomen; capacidad de concentración; conectar cuerpo y mente; una buena técnica de respiración y una actitud de disfrute durante la carrera. Como beneficio obtendremos principalmente más energía y más eficiencia con menos esfuerzo. Cada una de estas acciones por sí misma y de forma aislada mejorarán la carrera pero el ChiRunning tiene un enfoque holístico y cada una de ellas ayuda a las otras contribuyendo a que todas, utilizadas conjuntamente, lleven a un resultado positivo para nuestra carrera y para nuestro propio cuerpo.

Estas líneas que he escrito son poco más que un resumen de algunas páginas web que he visitado y de los primeros capítulos del libro Chi Running de Danny Dreyer, también autor de Chi Walking y Chi Marathon, que me ha gustado mucho pues yo misma practiqué Tai Chi hace mucho tiempo, desde hace muchos años practico regularmente yoga y me gusta la filosofía, la cultura y el pensamiento oriental. En él podréis encontrar una mayor profundización de los aspectos del running que aquí he comentado y otros capítulos dedicados a como aplicar la técnica de correr Chi a nuestro entrenamiento, un programa de desarrollo, un entrenamiento para un rendimiento óptimo y una dieta adecuada. Es muy ilustrativo como también lo es el DVD. Por otra parte existen muchos sitios web donde obtener consejos para iniciarse en esta técnica de entrenamiento y hasta apps para smartphone que proporcionan metrónomo para la cadencia de pasos, pero lo aconsejable es realizar algún curso o sesión con instructores certificados que te enseñen la manera correcta de correr Chi, no hay demasiados pero hay. Yo de momento estoy en modo autodidacta conociéndolo. Este método, que cada vez tienen mas adeptos en todo el mundo, es una opción basada en la observación, la experimentación y la adopción de los principios Tai Chi por parte de su creador Danny Dreyer. Aunque en occidente no es frecuente que las personas adopten fácilmente metodologías basadas en filosofías orientales, creas o no en el Chi, o seas o no seas afín al pensamiento oriental, aprender la técnica de ChiRunning y su práctica, algo que para un corredor medio llevará de uno a tres meses aprender, propiciará la conexión entre tu cuerpo y tu mente e influirá en el resto de pensamientos y acciones para toda tu vida.

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Human Body Art. Cecelia Webber

Cecelia Webber pasó su infancia en un pequeño pueblo de New Hampshire, al noreste de Estados Unidos, rodeada de naturaleza. Su casa natal estaba ubicada en medio del campo, entre bosques, plantas diversas y otros seres vivos. Este hecho, unido a que Cecelia poseía una personalidad tímida y una gran afición a la lectura, hizo que desde ya pequeña desarrollara un fuerte vínculo con la naturaleza, una actitud curiosa por el mundo que la rodeaba y una especial imaginación las cuales ha mantenido hasta su etapa adulta. 

Interesada por la ciencia y por la filosofía, Cecelia Webber comenzó estudiando filosofía en la universidad y posteriormente psicología y neurociencia, especialidad esta donde finalmente se graduó. Por su formación en este campo de la ciencia se sintió interesada en explorar la complejidad de mundo y de la existencia humana. Un día, con un propósito bien distinto al de su creatividad artística actual, tomó una fotografía de su espalda desnuda y la vio como un pétalo de una flor. Con ella construyó una flor rudimentaria y descubrió así, de una manera casi accidental, que podía, ayudándose de las ilimitadas posibilidades que la fotografía y las nuevas tecnologías, crear otras formas orgánicas a partir de cuerpos desnudos. Si para ella la ciencia era una manera de abordar y describir el mundo, el arte empezó a ser la forma de expresar como experimentarlo. 

Las creaciones de Cecelia Webber en arte digital conllevan mucho trabajo técnico, dosis elevadas de imaginación  y gran cantidad de experimentación. Para hacer posible la creación de cada una de estas piezas se requiere un proceso cuidadoso, lento y arduo, en algunas de ellas la artista invierte meses o hasta un año incluso. Previamente la artista ha realizado un proceso de investigación de la forma que quiere crear y de producción con la planificación y el dibujo de los bocetos de la idea imaginada. Después viene la toma de las fotografías de los modelos desnudos en múltiples poses y en distintos ángulos, en ocasiones llega a disparar unas 100 veces hasta conseguir el ángulo perfecto deseado. Una vez conseguidas las fotografías empieza a trazar la pieza con los programas informáticos de edición que le permiten, girar, recortar, colorear, manipular y colocar las imágenes de los cuerpos desnudos y posteriormente montar por capas o ensamblar todas ellas en sorprendentes composiciones. Como resultado de todo ello, Cecelia Webber logra unos bellos collages fotográficos que invitan al observador a realizar un asombroso juego de distancias basado en la ilusión óptica a la vez que nos muestran la desnudez del cuerpo humano como medio de expresión y como forma de comunicación. 

El cuerpo humano es para Cecelia Webber el medio a través del cual experimentamos nuestra existencia, el medio por el cual cada uno de nosotros experimentamos la realidad percibida.  Sus creaciones artísticas con desnudos tienen su origen conceptual en un replanteamiento del cuerpo humano como protagonista de la obra artística y como vehículo de emociones, y en una nueva contextualización del cuerpo y del desnudo desde el punto de vista de la naturalidad y el respeto. Nuestro cuerpo y nuestra desnudez son dos realidades de la vida. Con sus trabajos con cuerpos desnudos, Cecelia Webber pretende que el espectador tome conciencia de su propia conexión con la naturaleza, que inspiren en él un sentido de responsabilidad o la toma de decisiones responsables con la naturaleza, la ecología  y el medio ambiente al mismo tiempo que desarrolle para sí mismo una imagen positiva, hermosa y saludable de su propia desnudez.

Fascinantes !!

Todas las imágenes son propiedad de Cecelia Webber. Mariposas, aves, flores y otros elementos
de la naturaleza puedes encontrarlos en su web o en su página facebook.

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Recetas redondas de color cereza (XVII) : Moon cakes. Pasteles de Luna

Ni redonda ni de color cereza !! 

Esta receta no tiene ninguna de las dos características que en principio hacen falta para estar dentro de la sección culinaria del blog. A ver como explico esto !! Cuando empecé hace un año el blog, la idea principal era publicar de vez en cuando recetas propias, o versiones adaptadas de las de otros, que tuviesen una forma redonda o redondeada y una tonalidad rosada que viniera de alguno de sus ingredientes. Ni era una idea super original ni especialmente "buena", solo era una idea personal que me ayudaba a mantener una línea, y no precisamente la corporal. Pero no sé ni como he ido saliéndome de la raya y he acabado haciendo Moon cakes cuadrados. Supongo que, al igual que muchas de las cosas que hacemos en esta vida, habrá sido por amor !!

Todo empezó hace poco menos de un año. Llevaba apenas dos meses con el blog cuando ví la receta de los Moon cakes en el blog de Sandra Mangas "La receta de la felicidad". Del blog de Sandra (SandeeA) me gusta todo: me gusta el nombre, me gusta la estética, me gustan sus originales recetas, las fotos me encantan y ella es... fantástica. Una nubosa mañana de noviembre, a la hora del desayuno y en pleno proceso de la dieta que todos los años me ocupa desde septiembre hasta Navidad, me tope con las fotografías de sus preciosos pastelitos chinos de Luna, Moon cakes, y fue, por mi parte, "amor a primera vista". Son redondos. Genial !! Me puse a leer y a investigar: admiten varios rellenos y uno de ellos es una pasta de judías rojas. Más genial aún !! Se hacen para la celebración del Medio Otoño chino. Biennn !! Queda tiempo. Lo apunto en la lista. "El amor sabe esperar", dicen algunos.

Pero resulta que el tiempo va pasando, pasa el invierno, pasa la primavera y llega también el final del verano. El otoño está próximo, me acuerdo de la receta como una de las posibles para elaborar próximamente y compruebo que no me da tiempo a comprar el molde por internet. Yo en su momento ya lo busqué y solo conseguí comprar en el "chino" del barrio uno cuadrado muy barato que me trajeron de encargo (fondant decorative punch set), pero el redondo imposible. Lo busqué también en establecimientos especializados orientales y les sonaba a "chino". Así que no me ha quedado más remedio que hacer los Moon cakes con esta forma y bueno, no han quedado tan mal.

Los Moon Cakes (Yue Bing) o Pasteles de Luna es un postre tradicional chino que se degusta en la festividad del Medio Otoño (Mid-Autumn), una de las más importantes de China, que se celebra el decimoquinto día del octavo mes lunar, este año el 8 de septiembre. Este pastel, que se elabora desde tiempos inmemoriales y que en su historia, según la tradición oral, lleva el honor "discutido" de haber sido usado como correo de mensajes ocultos que incitaban a la rebelión y a la sublevación contra el poder mongol, es popularmente un postre que representa la unidad familiar y sirve de ofrenda a la Luna durante esta celebración que es esencialmente nocturna. El Festival del Medio Otoño, vinculado a las leyendas de Chang'e, la Diosa de la Luna, es principalmente una noche de reunión familiar en la que los miembros de las familias chinas se reúnen en una cena al aire libre donde se regalan y comparten Moon cakes y buenos deseos. Los vistosos Moon Cakes son hipercalóricos, no sé donde he leído que tienen cada uno más de 1000 calorías, pero que no cunda el pánico !! Son algo pesados y solo uno de ellos te puede durar varios días. Quien esa noche se coma uno entero o varios, habrá recibido de sus seres queridos los mejores deseos de una vida larga y feliz pero creo que seguramente dormirá feliz y... algo intranquilo.

MOON CAKES - PASTELES DE LUNA

Los Moon cakes se componen de una fina capa de corteza y un relleno dulce denso. Por lo general, la masa de la corteza está hecha de harina, aceite y un sirope tipo caramelo, aunque hay otras que se preparan en frío con almidón de arroz. Algunas personas elaboran la masa incorporando otros ingredientes como huevo, leche, mantequilla, levadura... pero yo he realizado la masa tal y como la ha publicado Sandra en su blog, y como ella tampoco he añadido agua alcalina que ni me he molestado en buscar. Desconozco su utilidad y al no creerla un ingrediente clave los he realizado sin ella. Esta masa, de estilo Guang, tiene un bonito color dorado que le proporciona el golden syrup utilizado. En la superficie cada moon cake suele llevar una impresión con simbolos florales, geométricos o elementos chinos que representan longevidad y armonía. Hay diferencias regionales en cuanto a su preparación y cada provincia china tiene su propia manera de elaborarlos y rellenarlos. Uno de los rellenos más típicos es el de una mezcla de semillas de loto, dátiles y yemas enteras de huevo que representan a la Luna. Otros rellenos emopleados son la pasta de judía rojas, Azuki, o la mezcla de cinco semillas o frutos secos. Estos dos últimos son los que yo he realizado. No son algo complicado de hacer solo algo laborioso pero se le coge el punto enseguida.

Ingredientes:

Para la masa

- 200 gramos de harina común
- 120 gramos de golden syrup
- 53 gramos de aceite de girasol refinado

Para el relleno

- 200 gramos de harina de almendras
- frutos secos: maní, nueces, almendras, pipas de calabaza, avellanas, sésamo...
- fruta confitada (opcional)
- azúcar y agua para elaborar un almíbar

- un envase de pasta de judías rojas o Azuki. 300 gramos.

Para el pincelado

- un huevo y dos cucharadas de agua

1. En un bol echar el golden syrup y el aceite. Batir a mano para ligar bien los dos ingredientes. Añadir poco a poco el harina. Primero ir mezclando con la varilla o cuchara y finalmente amasar un poco a mano. Hacer una bola y dejar reposar en el bol tapado con film transparente para que no se seque. El golden syrup puede encontrase en la tienda gourmet de El Corte Inglés o en tiendas de repostería especializadas. El aceite puede ser aceite de cacahuete, nueces u otro aceite vegetal. Yo he usado el de girasol refinado especial repostería de Koipe. Las cantidades son algo mayores que las empleadas por Sandra pero proporcionales a las suyas.

2. Para el relleno de judia roja no hace falta preparación. Se emplea tal cual viene en el envase, solo hay que hacer bolitas con la pasta y reservar. Se puede encontrar en tiendas de alimentación chinas. En Madrid hay varias por el centro y por el distrito de Tetuán.

3. Para el relleno de frutos secos hay que hacer una mezcla de los frutos elegidos picados en gordo y aglutinarlos con una masa hecha con harina de almendras y un almibar ligero, enfriado un poco, preparado con la misma cantidad de azúcar y agua, unas 6 cucharadas. Se puede añadir otro tipo de ingredientes, yo he añadido cuadraditos de fruta confitada que se pueden encontrar en tiendas de patatas fritas y frutos secos. Para las cantidades de frutos secos contad con unos 50 gramos de cada uno más o menos y aún así sobrará. Mientras la masa está húmeda haced las bolitas porque sino se secará y será más difícil de trabajar. Reservar.

4. La elaboración de los mooncakes consiste en elaborar dos bolas, una con el relleno y otra con la masa que luego estiraremos para recubrir el relleno. Las recetas originales proponen una proporción de 70 % para el relleno y 30 % para la corteza. Sandrá varió la proporción a 60 - 40 y yo aún la he variado más al 50 % porque me parecía fina y no quedaban bien las esquinas y aristas de mi molde cuadrado. Hay que hacer una prueba a ver que tal queda. Es lo que se viene llamando "prueba-error" hasta que te queden bien. Pero no es difícil.

5. Dividir la masa en partes iguales y hacer las bolitas. Mi molde es de 75 "algo". Está escrito en chino pero supongo que son 75 gramos, con lo cual hice bolitas de masa de 35-40 gramos y bolitas de relleno también del mismo peso. Si la bola es muy grande, el molde casi no la prensará. El relleno de frutos secos es más duro y hace que el pastel conserve mejor su forma, el de judías rojas es más blando y el pastel puede caerse un poco al hornearse.

6. Para hacer el moon cake se aplasta y estira la bolita de masa (yo me he ayudado con un rodillo pequeño de fondant sobre una superficie enharinada). Se pone en el centro la bolita del relleno y se envuelve con la masa cerrándola por completo. Se da forma redondeada otra vez con las manos y un poco de harina para que no se pegue y se reserva. Hacer todos los moon cakes.

7. Una vez que estén hechas todas las bolitas de los moon cakes (con estas cantidades salen 7) hay que darles la forma con el molde. Al ser un molde cuadrado, sobre la mesa o bandeja les he dado con las manos una forma cuadrangular con el fin de que el molde no toque las paredes de la bola y la arañe. Se introduce la bola por completo y ya sobre la bandeja del horno cubierta con papel de hornear se prensa con el molde y con cuidado se quita.

8. Disponer todos los Moon cakes en la bandeja dejando un poquito de espacio entre ellos. Un truco para que no pierdan la forma es enfriarlos en la nevera por espacio de una hora aproximadamente y también se les puede pulverizar un poquito de agua antes de meter al horno para evitar las grietas. 

9. Hornear en el horno previamente precalentado a 180 grados, unos 10 minutos, sacar y pincelar con mucho cuidado la superficie del pastel con huevo batido al que se le ha añadido dos cucharadas de agua. No echar mucha cantidad. También se puede pintar con huevo y leche, huevo y aceite, leche... o pincelar con un pincel finito las líneas del relieve solo con yema o con yema y algún colorante. Bueno, aquí es donde cada cual luce su creatividad. Se vuelven a meter al horno otros 10-15 minutos, se sacan y se enfrían sobre una rejilla.